En concordancia con las políticas del Gobierno Nacional y motivados por un espíritu solidario con su comunidad, aprendices del SENA en Palmira vienen trabajando en un proyecto que ayuda a fortalecer valores a través del deporte y la recreación.
"La 'Escuela de formación para formadores a través del movimiento' es un proyecto ejecutado por los jóvenes de programas técnicos y tecnológicos en Acondicionamiento Físico, Deporte y Recreación, que luego de sus clases van al colegio a poner en práctica ese conocimiento con los niños. Esto nos ha dado excelentes resultados para nuestro proceso formativo con los jóvenes y para los estudiantes que ya lo piden", expresó Edwin Cabal, instructor del Centro de Biotecnología Industrial (CBI) SENA en Palmira.
"Escuelas en Movimiento", como le dicen los aprendices, beneficia a más de 2.300 estudiantes de las cuatro sedes de la institución educativa Harold Eder, ubicada en la comuna uno de Palmira, una zona en la que presentan fenómenos de violencia, según reportes de la Secretaría de Integración Social del municipio.
Para la rectora Nora Stella Montilla, el cambio en la actitud de los niños y la manera en la que salen corriendo de sus salones para recibir a los "profes del SENA" habla de la motivación y la alegría que sienten al tener esos espacios deportivos y lúdicos.
"Los aprendices han hecho un excelente trabajo. Han puesto en práctica unas técnicas muy buenas que ayudan a los niños a desarrollar la concentración y las habilidades motrices. Además, en medio del juego les enseñan respeto, compañerismo y trabajo en equipo, aspectos muy importantes en esta etapa de crecimiento, teniendo en cuenta las problemáticas sociales en las que muchos viven", agregó Montilla.
En el proceso, los niños no solo aprenden: también se divierten.
"Nosotros hacemos ejercicio, jugamos ponchado, hacemos carreras, saltamos lazo y muchas cosas más. Se siente cansancio pero también es muy divertido. Por eso, me parece muy chévere que los profes del SENA vengan a darnos clases", dijo un estudiante de segundo de primaria.
Esta iniciativa es liderada desde hace tres años por dos instructores del Centro de Biotecnología Industrial – SENA, (Edwin Cabal y Ferley Herrera), quienes hacen un gran aporte a la sociedad desde el desarrollo socioemocional de los niños vulnerables, hasta el crecimiento personal de sus aprendices para el mundo laboral.
"Este proyecto ha cambiado la vida de estos niños desde el componente del ser. Pero también, ahora se ven los resultados en nuestros egresados, pues gracias a esta experiencia se les han abierto puertas para trabajar con proyectos juveniles a nivel municipal, otros para ser profesores de educación física en colegios privados y hasta como entrenadores de equipos de fútbol juvenil", agregó Ferley Herrera.
"Hemos logrado que muchos jóvenes dejen las esquinas, se unan más a la vida deportiva. Se les brinda una nueva opción", afirmó Yilber Arboleda, egresado de CBI Palmira.
Este modelo de formación ha captado la atención y las miradas de otras instituciones educativas de la Villa de las Palmas, como el Rafo Rivera y la Antonio Lizarazo, que han invitado al SENA para que lo implemente en sus instalaciones con el apoyo de sus aprendices de las áreas de deporte y recreación.