​El lanzamiento de los cursos ‘Cosecha y Poscosecha del Aguacate Hass’ y ‘Manejo Agronómico de Cultivo del Aguacate Hass’, que impartirá el SENA en alianza con entidades nacionales e internacionales, se realizó en el Centro de la Innovación, la Agroindustria y la Aviación. 

La formación está dirigida a actores que hacen parte de la cadena productiva de la fruta y que deseen adquirir las bases necesarias para el cultivo de este tipo de aguacate. 

Los cursos, cada uno de 96 horas, se desarrollarán en nueve centros del SENA ubicados en las regionales Antioquia, Caldas, Cauca, Quindío, Huila, Risaralda, Tolima y Valle del Cauca. Hasta ahora estos programas son los únicos en Colombia diseñados específicamente para el buen manejo de la cosecha y poscosecha del Aguacate Hass, uno de los productos más importantes de la canasta agrícola exportadora en el país. 

“Estos cursos, en alianza con el SENA, buscan fortalecer el sector en términos de calidad, que los productos manejen sus prácticas de cultivo de cosecha, que se empaque mejor el producto y así mejorar la competitividad del producto en los mercados en los que estamos actualmente, en especial el de la Unión Europea”, dijo Andrés Castellanos, gerente de exportaciones de Agroalimentos de Procolombia. 

Esta formación es el resultado de un proyecto de cooperación internacional entre el SENA, Procolombia, el CBI de Holanda, Analdex y el PINE de Aguacate Hass. 

Por su parte, Hernán Darío Mariaca, Líder del programa SENA Emprende Rural en Antioquia, afirmó que “Este convenio que firmó el SENA con los países bajos representados en Holanda, en el que también participan otras entidades nacionales, busca una transferencia tecnológica y formación pertinente y de calidad a los trabajadores de las grandes fincas productoras de aguacate, así como a las pequeñas y medianas unidades productivas”. 

Según cifras de Procolombia, el Aguacate Hass es la segunda fruta que más exporta Colombia después del banano; sus ventas registraron US$53 millones durante 2017, con 10 mil toneladas más que en 2016, gracias a que la Unión Europea y de Estados Unidos, abrieron los mercados a los productores colombianos.