El Centro Agroecológico y Empresarial es una de las edificaciones beneficiadas con el proyecto Ciudad Energética, una iniciativa de la Unidad de Planeación Minero Energética UPME y la Embajada de Suiza Cooperación Económica y Desarrollo SECO que busca mejorar la gestión energética en ciudades colombianas dentro de las cuales se encuentran Pasto, Montería y Fusagasugá.

En total fueron 40 paneles solares de 330 vatios los que se instalaron en la sede principal del SENA Fusagasugá ubicada en la vereda El Resguardo sector Quebrajacho lote 1, procedimiento que se realizó bajo la resolución CREG 030-2018, comisión reguladora de energía y gas a pequeña escala a través de Sonnensol, empresa favorecida por el Fondo Emprender y prestadora de servicios de ingeniería eléctrica, especializada en ofrecer soluciones integrales con energía solar a través del diseño, comercialización, instalación y legalización de sistemas fotovoltaicos.

"Con esta adquisición el Centro tendrá una fuente de energía ilimitada, más limpia y amigable con el medio ambiente, tendrá bajos costos en el funcionamiento y mantenimiento de los paneles solares los cuales cuentan con una vida útil de hasta 25 años después de su instalación", expresó Carlos Alberto Silgado Mendoza, gerente comercial de Sonnensol.

El funcionamiento de estos paneles se basa directamente en la radiación solar para producir electricidad, utilizando el llamado efecto fotoeléctrico a través del cual se absorben fotones o partículas lumínicas y se liberan electrones, generando de esta manera corriente eléctrica la cual se puede ser utilizada en aparatos tecnológicos, lugares alejados o de difícil acceso, satélites solares, señales de tráfico entre otros.

A raíz de esta implementación, y el alza que ha tomado la energía fotovoltaica en el mundo, el SENA Fusagasugá decidió abrir un nuevo programa de formación técnica titulado Mantenimiento e instalación de sistemas fotovoltaicos, que busca formar aprendices que cumplan con las competencias laborales acordes a las necesidades actuales del mercado laboral.

Durante 9 meses de etapa lectiva y 6 meses de etapa productiva, nuestros aprendices se capacitarán en el desarrollo e implementación de tecnologías emergentes, avanzando en materia ambiental y contribuyendo positivamente al cambio climático desde la educación, manifiesta Ferney Alexander Rodríguez, instructor de generación de electricidad.