La iniciativa de crear un espacio similar a una industria de cervecería artesanal partió de la investigación que adelantó un semillero del área de biotecnología vegetal del centro de formación. Tanto aprendices como instructores se interesaron en conocer los procesos de fermentación a partir del uso de los productos cultivados en la finca.

"Para llevar a cabo el proyecto nos unimos con las regionales del Huila, César y Valle del Cauca que compartían la iniciativa de crear bebidas fermentadas por tratarse de una tendencia mundial. Los cuatro centros presentamos la idea a dirección general y luego de un proceso riguroso recibimos el apoyo financiero para organizar y comprar la maquinaria requerida para los ambientes", manifestó Sandra Toro, líder SENNOVA del SENA Mosquera.

Aunque el proceso de fermentación empezó con la receta tradicional para hacer cerveza artesanal, usando malta de cebada, lúpulos y levadura; los instructores y aprendices, durante el proceso de formación, están produciendo cerveza de distintos sabores y características diferentes como cerveza de mango, agraz, mora y arándanos, esperan agregar otros ingredientes a partir de la práctica y la experimentación.

"Para hacer cerveza se requiere de la organización y el alistamiento de los equipos (la caldera, los fermentadores) y de los ingredientes. Se muele la malta, se macera y se deja a una temperatura de 64 grados para que inicie su proceso enzimático, donde el almidón se convierte en azúcar. A este resultado se le agrega los lúpulos que son los que le dan el amargo a la cerveza. Luego se separa la biomasa formada y se coloca en los fermentadores a una temperatura de 15 grados, se agrega la levadura y se deja allí durante aproximadamente 15 días. Pasado este tiempo la cerveza se puede envasar y dejar madurando para el consumo final", nos cuenta Mario Colorado, instructor del SENA Mosquera.

Los aprendices que se formen en este ambiente podrán salir con una idea de negocio y empezar como emprendedores, y los empresarios, que llevan muchos años en el negocio, podrán certificarse y certificar a sus colaboradores.

"A futuro queremos consolidar los requerimientos que nos solicita instituciones como el INVIMA para poder ofertar nuestra cerveza. Buscaremos unirnos con los gremios cerveceros para producir una levadura autóctona que podamos certificar con el sello Colombia y así la cerveza que se haga en el país sea conocida a nivel mundial", Mario Colorado.