Con mucho entusiasmo, 42 mujeres rurales de los municipios de Dibulla y El Molino, en La Guajira, recibieron insumos por parte del SENA para la producción de huevos semi-criollos con fines de comercialización.

"Nos llena el corazón ver cómo este grupo de mujeres emprendedoras reciben con tanta gratitud su unidad productiva de gallinas ponedoras para la comercialización de huevos semi-criollos. Además de aportar a la calidad de vida y seguridad alimentaria de todos los beneficiarios, el objetivo es fortalecer su proceso educativo, pues recibieron formación a través del Centro Agroempresarial y Acuícola", explica Aurys Pérez, Líder Regional Atención a Víctimas y Población Vulnerable del SENA.

Estas acciones tienen como objetivo la articulación entre entidades para la generación de unidades productivas que beneficien a la población vulnerable. En ese sentido, entre Dibulla y El Molino, el SENA hizo entrega de 500 gallinas ponedoras, 10 rollos de mallas para cercar, 80 bultos de alimentos para gallinas, medicamentos y 20 comederos, insumos que hacen parte de los materiales de la formación complementaria para comunidades vulnerables desde los programas SENA Emprende Rural (SER) y Atención a la Población Víctima.

"Gracias al SENA por esta gran oportunidad. Estos animales producirán huevos semi-criollos que aportarán a nuestra alimentación, nos servirán para comercialización y, sobre todo, nos ayuda a salir adelante y fortalecer nuestros emprendimientos", expresa Starly Polo, beneficiaria del SENA y miembro del Consejo Comunitario de los Negros del Río María Mina en el corregimiento Campana Nuevo, en Dibulla.

Dairo Aviloria, director de UMATA en El Molino, también manifiesta su gratitud y compromiso frente al proyecto rural que inicia. "Gracias al SENA por traer progreso con estas unidades productivas, gracias por tener en cuenta a mujeres trabajadoras que son pilar fundamental para el desarrollo socioeconómico de El Molino. Desde ya manifestamos nuestro apoyo para que este proyecto se mantenga vivo", indicó.

Al dejar capacidades instaladas en las comunidades vulnerables y la alianza con los entes territoriales locales, el SENA sigue comprometido con el desarrollo del sector rural, con atención especial a las mujeres cabeza de familia, negritudes, afrocolombianos, indígenas, desplazados y víctimas del conflicto armado en La Guajira.