La reactivación económica en el campo ha sido uno de los grandes retos para los campesinos y quienes ahora hacen parte de la nueva ruralidad para quedarse y ser productivos. En efecto muchos han tenido que reinventarse y generar nuevos proyectos apalancados en los recursos con los que cuentan en su entorno, este es el caso de la unidad productiva El Progreso.

"Con el tema de la pandemia y la carestía de los insumos agrícolas ocasionados por el conflicto armado en Rusia, los campesinos nos enfrentamos a una situación difícil: nos vamos para la ciudad en busca de nuevas oportunidades o nos quedamos y hacemos otra cosa. Optamos por quedarnos", señaló Moisés Coy Tello, aprendiz del programa SENA Emprende Rural (SER).

Moisés Coy encontró en el programa SER el apoyo que estaba buscando para no abandonar su finca ubicada en la vereda Perico del municipio de Sibaté. Los instructores le presentaron el curso de Emprendedor en Establecimiento y Manejo de Hongos Comestibles, alternativa que no dudó en aceptarla.

"Nosotros teníamos unos espacios que utilizábamos como porquerizas y galpones, los instructores me indicaron que se podrían acondicionar estos espacios y fue así como conformamos la unidad productiva de cultivo de orellanas. Hoy, podemos decir que nos reinventamos para seguir en el campo", agregó el aprendiz.

Con los espacios acondicionados, este emprendedor cundinamarqués ya cuenta con cámaras de incubación y crecimiento, así como una zona para realizar la pasteurización de los sustratos que son utilizados para el cultivo del micelio, un equivalente a la semilla de las orellanas.

En palabras del instructor del programa SER en Soacha, Nelson Pachón, "entre los géneros de hongos más cultivados en el país se encuentran los denominados hongos de especialidad, de los cuales existen diversas especies del género Pleurotus, conocidas con el término castizo de orellanas y otras variedades del hongo tipo gourmet que son las que más exportan como el portobello y ganoderma shiitake".

De acuerdo con Fedesarrollo, actualmente, el cultivo de hongos en Colombia se encuentra en plano crecimiento, quienes ya llevan algún tiempo lo exportan a mercados de Norteamérica, Centroamérica y Sudamérica. Vale la pena destacar que la demanda en el país está creciendo y el volumen de ventas locales ha incrementado hasta alcanzar el 70% de la producción total.