​En su propio territorio, tenido en cuenta su vocación y su entorno, indígenas de la comunidad Nasa asentados en el Municipio de Florida, al Suroriente del Valle del Cauca, se han convertido en el primer grupo étnico de esta naturaleza que recibe formación por parte del SENA en el departamento.

Se trata de integrantes del resguardo Kwesh Yu'Kiwe, quienes ya recibieron una certificación como Técnicos en Operación Turística Local y que podrán continuar formándose en el segundo semestre del 2022 en los cursos complementarios Cocina Ancestral y Coctelería, así como en una segunda fase de capacitación del técnico en la actividad turística.

"Para nosotros esta formación ha sido una sensación muy buena y sobre todo para los jóvenes de la comunidad, ya que es la primera vez que tenemos al SENA con nosotros. Teniendo este conocimiento podemos explorar positivamente nuestro territorio pues contamos con todos los recursos para hacer un turismo ecológico", expresó José Arley Cruz, joven aprendiz indígena.

El proceso de formación se adelanta desde el Centro Latinoamericano de Especies Menores, CLEM-Tuluá y se lleva a cabo por completo en el territorio Nasa, generando mayor acercamiento y sentido de pertenencia no solo con la comunidad sino con el proyecto, puesto que favorecerá la dinámica de la economía local.

El instructor encargado de impartir los conocimientos fue Javier Maldonado, quien aseguró que "las expectativas eran altas al llegar a la comunidad pues encontramos personas ávidas de conocimientos, lo cual favoreció el desarrollo del programa".

Con la primera fase de esta iniciativa se logró certificar a 21 aprendices.   

"Esta presencia en los territorios, en desarrollo del Modelo de Atención Integral de la Regional Valle, contribuye a la generación de oportunidades en el marco de la estrategia de Economía naranja del gobierno nacional. Así le apuntamos a mejorar la calidad de vida de las comunidades en el Valle", indicó Ángela Patricia Ibarra Quiroga, Subdirectora del CLEM.

La llegada del SENA al resguardo de la comunidad Nasa en Florida es sentida por los indígenas como una oportunidad para transformar su realidad en una relación armónica con el entorno.