El Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) participó y dejó en alto el nombre de la entidad con ocasión de la conmemoración del clásico 'La Vorágine' de José Eustasio Rivera. Y lo hizo desde el campo del emprendimiento y la gastronomía.
A través de un estand institucional se realizó la presentación de experiencias de formación gastronómica típica y amazónica con aprendices e instructores de la regional.
Este espacio visibilizó la investigación y el trabajo que el SENA viene generando en el mundo de los sabores como sector importante para la economía del departamento. Además, el evento contribuyó con el conocimiento cultural y ancestral de los productos que se llevan a la mesa de propios y visitantes, abonando el terreno que aporta a la identidad del territorio putumayense.
"En la muestra gastronómica se ofrecieron arepas realizadas a base de chontaduro con quinua y carne, sodas de chontaduro, malteadas de yuca, frituras de yota y ceviche amazónico compuesto por cidra, tomate, yota, cebolla y piña", puntualizó Jhon Jairo Botina, instructor de Cocina.
Juan
David Correa Ulloa, ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, se hizo
presente; reconoció la riqueza de los productos amazónicos, el talento y el
factor de innovación que se tiene al momento de presentar los platos y bebidas
con una condición de desarrollo de identidad.
Ejemplo
de ello es el negocio ‘Paraíso Ancestral’, apoyado por el Fondo Emprender del
SENA, convocatoria rural, dedicado a la gastronomía, artesanía y turismo local.
Su representante legal, Edilma del Carmen Zuin, es indígena yanacona del
municipio de Mocoa.
La
conmemoración tuvo lugar entre el 11 y 13 de abril en la capital de Putumayo, con
actividades colmadas de arte, literatura y memoria. Fue organizada por el
Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, la Embajada de Colombia en
Brasil, la Biblioteca Nacional de Colombia, la Gobernación de Putumayo,
Indercultura y la Alcaldía de Mocoa.
Un
clásico de orgullo
‘La
Vorágine’ es una obra literaria del escritor José Eustasio Rivera, que retrata
la violencia causada por la bonanza del caucho en el siglo XX, y expone las
duras condiciones bajo las que eran sometidos los pueblos indígenas de la
región.
Putumayo,
considerada la puerta de la Amazonía colombiana, tiene 15 pueblos indígenas,
hablantes de 10 lenguas maternas, que son protagonistas; por medio de la
palabra y los cantos ancestrales, realizan la armonización colectiva. En un
acto de reconciliación, se reflexiona sobre la perseverancia y la resiliencia
de los pueblos originarios de Putumayo afectados por la explotación cauchera a
comienzos del siglo anterior.