Hasta Chinchiná, municipio donde está la Escuela Nacional de la Calidad del Café y Paisaje Cultural Cafetero, del SENA Caldas, llegaron 30 caficultores de la Asociación de Productores de Cafés Especiales de Marmato (Aprocaesmar), con el propósito de compartir sus experiencias con los aprendices y recibir transferencia técnica de conocimientos por parte de los expertos de la entidad.
La comitiva marmateña llegó a este escenario de aprendizaje con el apoyo de Aris Mining, empresa de minería que viene promoviendo proyectos productivos alternos a la actividad minera que permiten fortalecer las oportunidades de desarrollo económico y social para las comunidades.
“Este tipo de espacios se logran gracias al trabajo conjunto entre las diferentes entidades, para este caso Aris Minig y la Alcaldía de Marmato llevaron campesinos a espacios técnicos especializados. Fue muy grato ver como los visitantes compartieron sus vivencias con nuestros instructores y aprendices, al mismo tiempo conocieron toda nuestra capacidad instalada y se llevaron una experiencia entorno al café, incluida la transformación del grano en bebidas”, indicó Claudia Jaramillo, coordinadora académica del Centro para la Formación Cafetera del SENA Caldas.
Por su parte Luisa Fernanda Castro, integrante de la asociación cafetera, manifestó que además el grupo de la asociación estuvo acompañado por algunos jóvenes de los colegios rurales del municipio de Marmato, quienes están interesados en aprender sobre toda la cadena productiva del grano emblema del país.
“El tema del barismo me ha parecido muy interesante, siento que con este oficio nosotros los jóvenes podemos salir adelante y aportarle valor agregado a nuestro producto”, dijo Juan Esteban Rendón, uno de los jóvenes de este grupo, que proviene de una zona donde se acostumbra a sembrar, recolectar y vender el café en pergamino.
La Escuela Nacional de la Calidad del Café y del Paisaje Cultural Cafetero (PCC) fue creada en 2017 entre el SENA, la Alcaldía de Chinchiná y el Comité de Cafeteros de Caldas.